Un segundo artículo en el que nos referiremos a la importancia de mantener los ambientes correctamente calefaccionados. Aprovechamos para invitarte a leer el artículo anterior en el que tocamos el tema.
Ya nos hemos referido a la importancia de contar con un buen aislamiento en la vivienda para evitar las infiltraciones de aire frio desde el exterior o las pérdidas de calor que provengan del interior de las viviendas.
Diferentes alternativas de estufas
Las estufas a leña son una de las opciones más difundidas y conocidas, para los expertos en la material no es una alternativas no son las más recomendables ya que consumen más de lo que aportan. No son del todo eficientes y dejar ir de manera rápida el calor al exterior sin aprovecharlo al máximo.
Las estufas de inercia aportan calor de forma inmediato y el excedente es almacenado en baterías térmicas que toman formas de bancos, camas, etc. El calor con este tipo de estufa es liberado de manera lenta manteniendo los ambientes confortables aun cuando estén apagadas.
Las estufas transportables son fáciles de usar y económicas para adquirir. Las estufas solares tienen como combustible principal el sol son muy eficientes y tienen un menor impacto ambiental.
Dentro de los equipos que funcionan por distribución de agua, la losa radiante es uno de las maneras de calefaccionar más limpio, confortable y silenciosa. Se trata de formas que funcionan en base a la distribución de agua por una red de tuberías que se colocan de manera uniforme y enterrada debajo del piso, en estos casos el agua circula a unos 45 grados aproximadamente.
Este sistema ayuda en el ahorro de combustible y achica los costos, por otro lado, al estar debajo del suelo, no ocupa lugar en los ambientes que se puede usar para otros muebles.
Las que te mencionamos son solo algunas de las miles de opciones de los sistemas.
Recuerda que otra alternativa para mantener la calefacción de tu vivienda es sumar baterías térmicas. Estamos hablando de agregar muros, bancos, pisos y tanques de agua que tengan la capacidad de acumular el calor que es generado por las estufas o el sol que entra lentamente. Son muchos los materiales que se pueden emplear siendo el agua y las piedras las alternativas más eficientes.
Y, por último, nos referiremos lo fundamental de enfocarnos en la calefacción por ambiente. Se cree que es necesario mantener toda la vivienda caliente, pero solo pasamos largas horas en partes o sectores de ella. Si se puede limitar, sectorizar y dividir en compartimientos el ahorro será mucho mayor.
